Conciencia sexual femenina

Por Leila Youseff

       Psicoterapeuta  Humanista

       Terapeuta de integración psico-corporal

Cuenta el mito: “...Que mamá me contó y que a su vez oyó de su madre, que cuando el hombre me tocará, será EL,  el que me hará descubrir los placeres del amor y que en sus brazos me haré y me sentiré mujer. Él encontrará el camino hacia mi “Jardín del Edén”, y una vez allí gozaremos hasta fundirnos para crear muchos niños que conformarán nuestra familia…”

¿Cuántas de nosotras sentimos que si un hombre no nos dice que somos guapas no nos sentimos guapas? ¿Cuántas de nosotras gastan más de la mitad de su sueldo para comprar ropa, maquillaje, perfumes para GUSTAR a su novio, marido, amante, o jefe?

Una vez a la caza con todas nuestras “armas de mujer” y, que “cacemos” el mejor partido terminamos, unos meses o unos años más tarde, deprimidas, resentidas, depresivas, enfadadas, desilusionadas, con o sin niños en los brazos, para volver a repetir el ciclo una y otra vez.

Sentimos que nuestra responsabilidad consiste simplemente en ponernos atractivas, que nos miren, admiren, y que no pueden resistir nuestros encantos. Como si nos alimentáramos de eso, Y DESPUËS, qué pasa con nosotras, ¿hay algo más?

Por causa de este mito y de muchos otros más hemos otorgado todo nuestro poder a los hombres, haciéndoles los responsables de nuestro placer. ¡Y como nos gusta culparles cuando no nos satisfacen¡  Lo peor de todo eso es que se hace sin que nadie comunique nada a nadie. Vivimos en función de gustar a los hombres, de sentirnos a través de ellos, de descubrir y gozar de nuestros cuerpos a través de sus manos. Pobre hombre, vaya responsabilidad que le hemos cargado.

El hombre lo sabe todo

Se supone que por el mero hecho de ser un hombre, ya sabe lo que tiene que hacer en cada situación, con cada mujer, por muy joven o mayor, inexperimentada o no, fea o guapa que sea. Es la otra parte del mito: “EL HOMBRE LO SABE TODO”. Sin olvidar que nadie le enseñó a aquel hombre lo que tenía que hacer el día que estuviese a solas con una mujer, desnudos en una cama.

Simplemente le dijeron que las mujeres esperaban que ellos tendrían que saber cómo hacerlo de la manera que más placer daría a cada una de ellas, si ella no disfrutaba, sólo era culpa de él. Es ÉL que no supo encontrar la llave de aquella mujer.

¿Acaso conoce esta mujer la llave de su propio placer?

La mujer cree que es “el hombre” que le hace disfrutar plenamente de su sexualidad. Al hombre no le enseñaron cómo puede complacer a las mujeres. ¡Qué lío!

La mujer espera recibir placer  del hombre y el hombre supone que “tiene que dar placer” a la mujer.

Así que cuando los dos se encuentran cada uno ya tiene su expectativa en marcha  y por lo tanto cada uno conoce cuál es su rol y qué puede y tiene que esperar del otro.  Entran en contacto desde un lugar en el cuál cada uno está esperando recibir algo del otro. Algo que decidirá si este hombre esta a la altura de las “expectativas” o no. Todo un examen para el hombre que le pone en tensión y bajo presión antes de abrir la boca.

¿Donde está la salida de este ciclo vicioso e engañoso?

Mientras la mujer sigue dejando la responsabilidad de su placer en las manos del hombre y mientras el hombre sigue creyendo en tener que llevar esta responsabilidad como parte de su identidad de hombre seguirán las relaciones de parejas siendo un foco de dolor, una fuente de frustraciones,  desilusiones e interminables discusiones que terminan con una ruptura.

Hace falta una nueva educación sexual y una nueva consciencia de la sexualidad

-        Practicar sexo y disfrutarlo no es gozar de su sexualidad.

-        La sexualidad no es el coito.

-        La energía sexual es la ENERGÏA CREATIVA y de CREACIÓN más potente que tenemos y ya nos toca aprender a adueñarnos  de ella, aprender a disfrutarla y compartirla conscientemente venerándola por lo que ES.

-        Gozar de su sexualidad es un proceso de aprendizaje individual en el cuál la persona aprende a conectarse con su cuerpo para descubrirlo y desde allí compartirlo con quién elige.

-        Conectarse con su cuerpo implica aprender a no juzgarse y así puede ir integrando partes de ella misma rechazadas, dolidas, negada, heridas.

-        Cada parte de tu cuerpo negada, rechazada, herida es una parte de tu cuerpo donde está cortada la energía o por lo tanto privada de gozo. Lo que termina disminuyendo tu capacidad de gozar.

La energía creativa de la sexualidad está dentro de cada una de nosotras. Conectar con esta energía convierte el placer focalizado en el acto sexual en gozo en la vida cotidiana. Esto devuelve a las mujeres su propio poder e independencia. Desde allí compartir el acto sexual se convierte en un acto responsable, gozoso, profundo donde se da rienda suelta la expresión de la creatividad.

El acto sexual es el acto más profundo, más bello y más intenso de la expresión de nuestra creatividad. Es una  pena profanarlo y no vivirlo como tal. Cuando cada una de nosotras se siente capaz de disfrutar y de gozar de su cuerpo y de su energía creativa, entonces el acto sexual con la pareja se convierte en un baile en el cuál los “dos” bailan, hablan, penetran y se dejan penetrar por el placer de si mismos y del otro.

Si has hecho el amor alguna vez de esta manera jamás volverías a someterte a ningún hombre por hacerte sentir “mujer”. Si sabes hacer el amor desde este lugar YA ERES MUJER. Eres dueña de tu poder femenino y nadie te lo puede quitar.

¿Qué te parece? Vale la pena iniciar esta aventura ¿verdad?

 

LEILA YOUSSEF:

Una mujer Egipcia que afirmó su  libertad sexual en una cultura que la reprime. Buscó el afecto en el sexo por confusión. Conoció el poder de curar al hombre desde su feminidad. Vivió plenamente el arquetipo de amante.

 Y finalmente terminó encontrando la relación de pareja que describe en su artículo.

Se siente una amante eterna a pesar de estar en relación de pareja estable. 

A TENER EN CUENTA  EN LA AGENDA

Leila va a impartir un taller "Seducción Consciente" en Centro Nybell, Avda. Constitución, 41 5º G Granada, el sabado dia 4 de junio, mañana y tarde. Dara una conferencia sobre el tema abierta a todo el publico el viernes dia 3 de junio, a las 20 horas.

Información y reservas 958 09 82 16 - info.nybell@gmail.com